Jóvenes denunciaron ausencia del Estado

YPACARAI
Jóvenes de la diócesis de San Lorenzo denunciaron al Estado por estar totalmente ausente, en materia de políticas que favorezcan la inserción laboral y estudiantil del sector juvenil. Fue durante la VI Peregrinación Diocesana de Jóvenes hasta el santuario de Tuparendá bajo el lema “Hemos venido a adorarle”, realizada ayer.

Los jóvenes, mediante un manifiesto dado a conocer durante una misa celebrada en el santuario de la Virgen de Schoenstatt por monseñor Adalberto Martínez, obispo de San Lorenzo y coordinador de la Pastoral Nacional de la Juventud Peregrinación Diocesana de Jóvenes, señalaron que la ausencia del Estado está provocando la emigración de muchos jóvenes compatriotas a países extranjeros dejando atrás hogares, familias y amigos.

En otros puntos del documento, los peregrinos denunciaron a la clase política, que deja de lado los intereses del pueblo para ocuparse de intereses proselitistas de cada partido político. También, al Ministerio de Educación y Cultura (MEC) y los propios docentes que, con el afán de conseguir reconocimiento y cargos, mediocrizan la educación de los jóvenes “condenando nuestro futuro y el de nuestra patria”.

Por otro lado, también denuncian a los empresarios transportistas, que por acumular mayor riqueza, sin pensar en la población trabajadora y pobre, exigen subas de pasaje desmedidas, no acorde con el servicio que prestan. Asimismo, a la sociedad que cada vez más masifica y explota a los jóvenes creando un abismo cada vez mayor entre ricos y pobres.

La crítica también alcanzó a los medios de comunicación que, mayormente, ven y presentan a los jóvenes como un mercado que atrapar, mostrando realidades ficticias.

Así también, hicieron una autocrítica reconociendo que muchas veces toman la vida con irresponsabilidad, sin pensar que tienen en sus manos el futuro de un mundo que pueden convertirlo en un valle de miseria y tristeza o una tierra donde la ley sea el amor. Agregaron que los jóvenes y adultos, muchas veces, se olvidan de nuestros compatriotas indígenas, campesinos y marginados haciendo una opción a medias por los pobres.
Finalmente, los jóvenes se comprometieron a trabajar por una comunidad mejor, más justa y más humana. Pidieron a las familias, a los obispos, los sacerdotes, religiosos, educadores, medios de comunicación que sigan prestando una especial atención a la juventud para que puedan desarrollarse como personas, contribuyendo a la construcción de un mundo donde se viva en justicia, libertad, paz, verdad y amor.


Fuente: abc.com.py